viernes, 24 de febrero de 2012

José María del Castillo Velasco


(Para satisfacer las solicitudes de algunos estudiantes, acá les presento información sobre la vida del prócer local Licenciado José María del Castillo Velasco. Creo que para una tarea es suficiente con esto. Cito la bibliografía disponible entre paréntesis, destacando en esta entrega su perfil de municipalista, defensor de los indígenas y visionario sobre el agrarismo y el desarrollo económico. Los primeros datos biográficos los tomé de Silva Herzog, citado más adelante. Durante muchos años el municipio de San Antonino tenía un retrato de Demetrio del Castillo, escritor y periodista, hermano de José María, cuyo retrato equivocado se reproduce en el libro que cito de Silva Herzog---que lo tomó del municipio de San Antonino---. Gracias a los descendientes del prócer se usa actualmente la fotografía real del Licenciado José María del Castillo Velasco.)

Apuntes biográficos del Licenciado José María del Castillo Velasco

Con la cuarta constitución del país, promulgada en 1857, triunfó la República Federal, pero se omitió al municipio en la Constitución; sin embargo, durante el Congreso Constituyente del 56-57, el diputado oaxaqueño José María Castillo Velasco, había presentado una trascendental propuesta sobre la autonomía municipal.

Se trata de un hombre forjado en la más pura tradición nacionalista y libertaria;  entre cuyas  ideas había una preocupación central: la población organizada en municipios bajo condiciones de desarrollo social sostenido, como un eje político fundamental para el progreso del naciente Estado Nacional.

Nació en 1820 en el pueblo de San Antonino, hoy San Antonino-Castillo Velasco, municipio del distrito de Ocotlán, Oaxaca. Abogado, periodista y político liberal que fue perseguido y encarcelado por Santa Anna.

En varias ocasiones dirigió el periódico El Monitor Republicano. Fue secretario del gobierno del Distrito Federal en 1856 y diputado al Congreso Constituyente, miembro de la comisión redactora de la Constitución de 1857. Combatió contra la Intervención Francesa, obteniendo el grado de coronel. Participó en el sitio de Querétaro.

Fue Secretario de Gobernación del gabinete de Benito Juárez de marzo de 1871 a junio de 1872, y  murió siendo director de la Escuela Nacional de Jurisprudencia, en la ciudad de México en 1883. Creó la Escuela de Artes y Oficios para Mujeres, en el Distrito Federal, la Normal, una escuela para ciegos y un asilo de ancianos.

Castillo Velasco propuso adicionar en la Constitución de 1857, concretamente tres puntos sobre municipalidades que atendían a una personal concepción de avanzada sobre la autonomía municipal, la propiedad social y el desarrollo social.

Sus propuestas, extraídas de la Historia del Congreso Constituyente de 1857 de Francisco Zarco (COLMEX, 1956. p. 362-65), fueron:

·      Toda municipalidad con acuerdo de su colegio electoral puede decretar las obras y medidas que crea convenientes al municipio y votar y recaudar los impuestos que estime necesarios para las obras que acuerde, siempre que con ellas no perjudique a otra municipalidad o al estado.

·      Todo pueblo en la República debe tener terrenos suficientes para el uso común de los vecinos. Los estados de la federación los comprarán, si es necesario, reconociendo el valor de ellos sobre las rentas públicas.

·      Todo ciudadano que carezca de trabajo tiene derecho de adquirir un espacio de tierra cuyo cultivo le proporcione la subsistencia y por el cual pagará, mientras no pueda redimir el capital, una pensión que no exceda del 3 por ciento anual sobre el valor del terreno. Los estados emplearán para este efecto los terrenos baldíos que haya en su territorio y las tierras de cofradías, comprando, si necesario fuere, a los particulares, y reconociendo el valor de las tierras de cofradías y de particulares sobre las rentas públicas, que pagarán su rédito mientras no se pueda redimir el capital.

Estas propuestas las realizó como corolario de una certera disertación, fundamentada en el principio de que la soberanía reside en el pueblo;  de que las instituciones políticas  “no son más que el medio de procurar el bienestar social y ninguna de las que hemos experimentado lo logró.”

De que así como se reconocía a los estados partes integrantes de la federación, así debía reconocerse a las municipalidades partes integrantes de los estados, dado que la preocupación por el desarrollo del estado, debía lograrse a partir de la preocupación por el desarrollo de sus municipios.

También fundamentó sus propuestas en la situación de humildes familias que siendo nativos de lugares con una abundante riqueza natural, no eran dueños de nada. “¿No es vergonzoso para nosotros, liberales, que dejemos subsistir ese estado de cosas, cuando por leyes dictadas por monarcas absolutos se concedían esos terrenos a los pueblos, y se proveía así a sus necesidades? ¿Cuál es el origen de la guerra de castas que incesantemente nos amenaza y que sería el oprobio y la ruina del país, si no es ese estado de mendicidad a que han llegado los pueblos de indígenas?”

La cuestión indígena y la propiedad

En su exposición de motivos presentó una defensa de los indígenas, algunos de cuyos párrafos se reproducen:

“Hay en nuestra República, señor, una raza desgraciada de hombres que llamados indígenas, descendientes de los antiguos dueños de estas ricas comarcas y humillados ahora con su pobreza infinita y sus recuerdos de otros tiempos.

“Hombres más infelices que los esclavos, más infelices aún que las bestias, porque sienten y conocen su degradación y miseria. (...)

“Y esta raza, a pesar de tanta infelicidad y de tanta miseria, es la que cultiva los campos y provee de soldados al ejército. Por gratitud, pues, por respeto a la justicia, por conveniencia pública, saquemos a estos hombres del estado en que se encuentran y proporcionémosle medios de subsistencia y de ilustración.

“¿Cómo puede concebirse una república en que el mayor número de sus habitantes, que son los indígenas, están reducidos a esa desgracia y a esa humillación que he bosquejado apenas y que vosotros conocéis muy bien? ¿Cómo se han de establecer y afirmar las instituciones liberales, si hay una mayoría de ciudadanos para quienes la libertad es una quimera y tal vez un absurdo?
¿Cómo ha de existir una república, cuyo mayor número de habitantes ni produce ni consume? Que el poder de vuestra palabra, señores diputados, rehabilite a esa raza desgraciada, y habréis destruido uno de los grandes focos de disolución que amenazan de muerte a la república, y habréis aumentado su población como por encanto.

“Si se estudian sus costumbres, se hallarán entre los indios instintos de severa justicia y de abnegación para cumplir con los preceptos que imponen las leyes. Y siendo esto así ¿por qué ha de perder la patria el trabajo y la inteligencia y la producción de tantos de sus hijos? ¿Por qué ha de sufrir la humanidad que haya pueblos numerosos hundidos en la desgracia y en la infelicidad?
Para cortar tantos males no hay en mi humilde juicio más que un medio, y es el de dar propiedad a los indígenas, ennoblecerlos con el trabajo y alentarlos al fruto de él.

“No puede ser  justo que se prive a ningún hombre del ejercicio del derecho de propiedad que tiene por su misma organización física y moral.
Pero no sólo para los indios será provechoso este repartimiento de la propiedad, sino para nuestra llamada clase media, porque es notable que el pauperismo entre nosotros corroe y aniquila a los indígenas y a esa clase.”

Finalmente, el diputado Castillo Velazco concluyó: “por más que se tema a las cuestiones de propiedad, es preciso confesar que en ellas se encuentra la resolución de casi todos nuestros problemas sociales, y es preciso también confesar que los pueblos nos han enviado aquí no a asustarnos con la gravedad de las cuestiones, sino a resolverlas para bien de ellos.”

Visión de largo alcance

Analizando estas propuestas de reformas a la Constitución de 1857, Jesús Silva Herzog comenta en su excelente libro “El pensamiento económico, social y político de México 1810- 1964”, ( IMIE, México, 1967, p. 170), que en realidad “las tales adiciones eran equivalentes a una ley agraria concebida con indiscutible habilidad.

“La mayoría de los miembros del Congreso no las aceptaron, con el argumento de que se trataba de cuestiones secundarias de detalle, que no debían formar parte de la Ley fundamental de la República; mas en el fondo es seguro que el rechazo se debió más bien al temor de provocar violentas reacciones de los grandes terratenientes.” 

El maestro Silva Herzog agrega: “se ocurre pensar que si las adiciones de Castillo Velasco se hubieran incorporado a la Constitución de 1857 y se hubieran aplicado con celo y tenacidad, la evolución económica, social y política del pueblo mexicano hubiera sido diferente, y distinta de nuestra historia.

viernes, 17 de febrero de 2012

Controversia por el asilo abre la puerta al conflicto social

Es el crepúsculo.

Los rayos del sol simétricamente proyectados sobre el fondo azul parten el cielo dándole, por efecto de la resolana, un volumen extraordinario a nubes majestuosas que marchan lenta y alegremente.

En este corredor de barro rodeado de una gran cantidad de flores de ornato y arbustos cuidadosamente plantados se respira una sensación de inquietud, de expectación y de coraje. Son pocas personas. Selectas.  Son hombres y mujeres del pueblo que entregaron su esfuerzo, empeño y dedicación, a través del tequio, a la construcción del albergue para ancianos, que le ha dado prestigio y reconocimiento al municipio de San Antonino Castillo Velasco.

Ahora se están dedicando a juntar firmas para frenar lo que consideran una agresión al pueblo de San Antonino porque de manera furtiva se creó un nuevo patronato que---según dicen ellos--- no tiene ninguna representatividad, además de que esas personas están dedicadas a calumniar al Padre Alberto Ostiz Ostiz, encargado del asilo.

El viento fresco y puro corre haciendo travesuras por el corredor, agitando el follaje de los árboles, mientras el canto de las aves se va apagando lentamente en un ambiente con olor a flores y hierbas de olor, destacándose la yerbabuena, la ruda, el olor del pino...

Se quita su sombrero el señor de mayor edad y pregunta a quemarropa al pasante de derecho que extremadamente delgado parece que en cualquier momento se lo va a llevar el viento: ---"¿A poco es legal que una familia se autonombre a escondidas como mesa directiva del asilo y haga con éste lo que se les ocurra?

- ¿Por qué dice usted que es una familia la que se autonombró a escondidas? Pregunta el pasante.

- Pues porque lo hicieron secretamente, se portaron como el tlacomiztle que se esconde donde nadie lo pueda ver y en la oscuridad de la noche se lanza con furia sobre las gallinas para comérselas. Es un animal cobarde, pues.

- ¿Y por qué dice que se trata de una familia?

- Pues qué no te digo que todo el comité que se autonombró  como nuevo Patronato son una sola familia. Ahí tienes, como dice el periódico Noticias en su página 15 A de este 16 de febrero, a sus integrantes. Mira: ahí está Zeferino, que si es cierto, el donó el terreno para que se construyera el asilo, pero eso no le da derecho de hacer un comité con puros miembros de su familia pues Justino Antonino es su hijo, Omar Alejandro es su nieto, Inés Apolonia, es su hija, Virgilio Manuel es su hijo, Gregoria es su nuera y también está su otro yerno. Lo hizo con su familia porque sabe que ninguna persona honesta del pueblo se va a prestar a hacer cosas indebidas e injustas como las que están haciendo ellos.

Contesta el pasante: - Bueno, realmente la ley no prohíbe que una familia sea integrante de una Asociación Civil. Aquí el problema legal puede ser que no se cumplieron con las formalidades del procedimiento, lo cual se puede hacer valer con un recurso de revisión para buscar la nulidad de ese instrumento.

- ¿Cuál instrumento? pregunta la señora del rebozo negro.

- Perdón, dice el pasante. Me refiero al acta que ese comité presenta, que podría ser invalidada por la autoridad, además de que hay un problema de legitimidad porque a estas alturas, el asilo de San Antonino se ha administrado de buena fe como un proyecto comunitario. El asilo no es de ninguna persona o gobierno, el asilo es de la comunidad de San Antonino, que le encargó, por usos y costumbres, la dirección, administración y representación del asilo al Padre Alberto Ostiz.

Yo le pregunto al pasante - ¿Realmente puedes invocar a los usos y costumbres en este caso?

El pasante se agarra la barbilla y sonrié con una dentadura blanca y grande que deja ver dos colmillos más alargados que los ordinarios y contesta ---Esta es una comunidad indígena. En los hechos la operación del asilo se ha mantenido como un uso y costumbre.

Toma la palabra nuevamente la señora del rebozo negro: --Bueno, está bien. Supongamos que logramos que se desconozca ese nuevo patronato ¿ y luego? ¿qué va a pasar con el asilo? ¿Puede continuar el Padre Alberto al frente del asilo?

El pasante se queda mirando el cielo que se ha tornado rojizo. La temperatura empieza a descender. Parpadea y contesta: ---Al padre Alberto lo están discriminando por ser español, lo están atacando por ahí. Lo que podríamos hacer es que opte por la doble nacionalidad o adopte totalmente la nacionalidad mexicana. El podría ser un miembro del nuevo comité, desde luego.

Toma la palabra el comerciante del mostacho tipo porfirista: ---¿Ya vieron que quienes lo acusan por su origen español son las mismas personas que dizque defienden a los indígenas, pero a ver, díganme, qué idioma hablan esas personas...pues el español que trajeron los españoles; a ver díganme, qué religión profesan esas personas que lo critican por ser español?...pues la católica, que trajeron los españoles y si se fijan, como ha dicho el licenciado aquí presente en otras ocasiones, las vacas las trajeron los españoles, las gallinas, las trajeron los españoles, los borregos los trajeron los españoles....entonces qué, se sienten muy indias mis compañeras esas, pero no son más que envidiosas e ignorantes...

Habla el señor mayor de los pies descalzos y curtidos, levanta el brazo y sus dedos fuertes y macizos de campesino hacen una garra como cuando desprende la cebolla de la tierra: --- También lo están atacando por el dinero. A mí me consta que el padre Alberto es un buen gestor y todo lo que recibe lo reparte. Aquí en la iglesia de San Antonino han llegado personas pobrecitas de muchos pueblos a recoger cobijas, despensas, a pedirle ayuda al Padre Alberto y él se las ha dado sin pedir nada a cambio. Pero acuérdense que el padre Alberto siempre ha sido hostigado por el manejo de los dineros porque él es el único padre que ha puesto orden en los ingresos del templo. El le quitó sus canonjías a los encargados y a las catequistas rebeldes que hacían sus negocios a costa de la iglesia. Por eso lo atacan.

La señora del rebozo negro agrega: ---También dicen que no es padre, pero eso es una verdadera mentira porque en una reunión donde se trato el mismo tema, él mostró sus papeles. Hasta ha sido maestro de teología.

Deja tú eso---dice la señora de trenzas---, esos que lo critican ni siquiera van a misa. Son puros judas...

El pasante de abogado contempla el piso de tierra y su mente parece que encuentra algo. ---Bueno, lo que me alarma es que el DIF está convalidando las injusticias de este asunto, porque están juzgando al Padre Alberto en la prensa. Al menos los acusadores del padre Alberto que están dañando su reputación podrían ser demandados por daño moral, pero en ese tipo de denuncias está mal que participen funcionarios públicos que debieran ser imparciales y no prestarse a manipulaciones.

Pido el uso de la voz. ---Yo quisiera preguntarte abogado, cuál es el camino menos costoso, político, legal, social y económicamente para resolver favorablemente este problema?

Contesta el pasante de abogado sin pensarlo: Hay dos vías. Primeramente se tendrá que hacer una asamblea con los sobrevivientes del acta constitutiva del Patronato original para que expulsen a Zeferino por abuso de confianza. Luego, el pueblo constituido en Asamblea nombrará a personas honestas y representativas de la comunidad para renovar al comité. La otra vía es entregárselo al gobierno y que ellos lo administren totalmente.

En el primer caso sería necesario que la Asamblea General de Ciudadanos de San Antonino Castillo Velasco hagan una colecta, y previo dictamen de un perito valuador, se le devuelva en efectivo el valor del puro terreno a Zeferino. Evidentemente que por su conducta de autonombrar a su familia en el Comité y por su claro abuso de confianza, él ya no podría participar en el asilo.

En el segundo caso, se tiene que revisar la legalidad y legitimidad del autonombrado nuevo comité y cuando se logre su desconocimiento se promovería su traspaso al gobierno del estado o al gobierno municipal.

Casi en bola contestaron todos:---- ¡Ni locos!

Habla el artesano que hasta entonces se mantenía callado: ---Bueno, pues vamos viendo que se respete la ley porque esta obra es del pueblo y no se vale que Zeferino después de tanto tiempo se interese por actuar en su papel de Presidente fundador del patronato ni que las autoridades descalifiquen con la mano en la cintura un proyecto que es del pueblo de San Antonino y donde insistan, vamos a demostrar que no nos estamos chupando el dedo porque no nacimos ayer y si no sabemos de leyes, sí sabemos de justicia y lo que están haciendo contra el asilo y en contra del padre Alberto es una injusticia en contra del pueblo de San Antonino.

La señora del rebozo le dice al pasante: ---Entonces qué, ¿si nos vas a acompañar este domingo a la junta del asilo?

El pasante se pone de pie y con su delgadez extrema parece verse muy alto y contesta: ¿sabe por qué estoy tan delgado? (Nadie contesta, excepto él mismo) "Pues, porque de esta manera no hago ni sombra."

Los últimos rayos del sol se han metido. La noche es fría y los seres vivos se resguardan para emprender con energía sus actividades ante la potente y cálida luz del siguiente día.

Continuará...

martes, 14 de febrero de 2012

A un año de Bodega Aurrerá en San Antonino

Aparentemente no pasó nada.

A un año de que se instalara la Bodega Aurrerá a la entrada de la Avenida Castillo Velasco en San Antonino    únicamente las tiendas más pequeñas se quejan de las bajas ventas, lo que ha llevado a más de una a cerrar, mientras que las tiendas de abarrotes más grandes, dan la batalla en precios contra esa cadena comercial.

Según dicen los principales abarroteros de la comunidad, en muchos productos como el azúcar, el aceite los jabones y los dátiles, por ejemplo, ofrecen en general precios más bajos que en Bodega Aurrerá.

Ellos comentan que definitivamente esa tienda de supermercado pegó a las tiendas distribuidoras de abarrotes más grandes de la cabecera distrital que lucen abandonadas, en relación con sus mejores tiempos cuando todavía no se abría Bodega Aurrerá.

A este centro comercial llegan diariamente consumidores de todo el distrito, que además hacen sus compras de manera familiar.

Muchos críticos que estuvieron abiertamente en contra de la apertura de esa tienda, hacen ahí sus compras con total naturalidad.

Así es porque el consumo no tiene ideología.