viernes, 30 de diciembre de 2011

Emotiva festividad de la Navidad

Es un éxito.
Como cada año, la población realiza las festividades de la navidad, teniendo como principal actividad la representación del nacimiento del Niño Jesús.
El mayordomo de la festividad es apoyado por familiares y amigos para arreglar el altar principal del templo católico y levantar fuera de éste la casita de carrizo que representa el establo.
La caracterización de los adornos es fantástica, ya que se trata de frutos como plátano de castilla, tejocote, piña criolla, granada de la india y heno.
Los pastorcillos, niños que llevan vistosos trajes de vivos colores se acompañan por los ángeles, que son niñas vestidas de blanco con alas, y todos encabezan las procesiones con velas y calendas.
En el fondo se recrean no sólo los valores religiosos de esta comunidad mayoritariamente católica, sino, principalmente, el valor de la familia, como sólida columna de pervivencia e identidad. 

miércoles, 16 de noviembre de 2011

Bordados de San Antonino



Es un asunto de inteligencia.

Los bordados de San Antonino se realizan con una simple pluma para ir llenando el espacio en blanco, con una precisión matemática y sin más recurso que la imaginación.

Se recuerda el arte barroco por la imaginería desbordada.

Bien por las artesanas del bordado de San Antonino.

lunes, 14 de noviembre de 2011

Flor Inmortal en la historia



La aristocracia de principios del siglo XX (c. 1900), realizaba frecuentes visitas a los campos de San Antonino para conocer la flor inmortal, cuyas artesanías gozaban ya de amplio reconocimiento en los principales mercados del Estado.
De acuerdo con información local, se supone que la flor inmortal es una flor originaria de Europa y que fue obsequiada a los artesanos de San Antonino, por generosos turistas, porque las artesanías se hacían entonces con flores frescas.
Acá una foto del álbum familiar de Porfirio Santiago, uno de los archivos fotográficos más antiguos de San Antonino Castillo Velasco.



jueves, 3 de noviembre de 2011

Cierra el shintagúl el día de muertos

Es una tradición.
Este dos de noviembre por la noche, decenas de niños disfrazados de muertos salieron por las calles de San Antonino para solicitar regalada la fruta de los altares.
Acompañados de grabadoras reproducían música y en las esquinas de las calles se ponía a bailar para luego echar a correr a los domicilios para pedir la fruta gritando "¡queremos shintagúl!, ¡queremos shintagúl!".
Las amas de casa los dejan entrar y los niños literalmente se lanzan sobre la fruta para escoger la que más les guste.
Antiguamente salían los mayordomos de la iglesia a solicitar el shintagúl.
En cada casa eran recibidos con tepache y mezcal y al término del brindis que les ofrecía el casero, se llevaban la mayor parte de la fruta de los generosos altares de San Antonino, en los que se encuentra fruta de la temporada y el tradicional pan de muerto que llega a medir hasta cincuenta centímetros de diámetro.
Los mayordomos juntaban todos los regalos de frutas y alimentos y los concentraban en la iglesia de San Antonino, hasta donde llegaba gente de escasos recursos de muchos pueblos y se les compartía, quedándose una parte para el párroco.
Hoy en día los mayordomos ya no salen. Pero los niños, como cada año, se organizan en grupos y salen en carretas arrastrando botes mientras bailan y gritan ¡Queremos shintagúl! ¡Queremos shintagúl!

domingo, 30 de octubre de 2011

Día de muertos

Es fantástico.
Existe un ambiente propicio para festejar a los que se han adelantado al más allá.
Prácticamente todo San Antonino huele a pan de muerto; a flores de los más variados olores y diseños y a mole, chocolate y frutas.
El mercado local desde la madrugada tiene un gran movimiento de mercaderes y de consumidores que vienen de todo el distrito y de lejanos lugares a surtirse de flor y de pan, principalmente.
También, vendedores de los pueblos de Miahuatlán, Ejutla, Zimatlán, Tlacolula, de la Sierra, traen sus productos a ofertar en un mercado histórico.
En este marco, el padre Manuel Maya, originario de San Antonino Castillo Velasco, realizó la misa del medio día este domingo, que está dedicada a los niños--que abarrotan el templo---, y enfatizó los valores que deben llevar como guía del buen ciudadano y del buen católico.
Con esta grata presencia, arrancan las festividades de muertos.

 

martes, 25 de octubre de 2011

El Cine y San Antonino

Sí lo hubo.
A mediados del siglo pasado, en una casa que se ubica atrás del mercado de San Antonino se proyectaban películas a bajo costo. Primero fue el cine de Mino Díaz, vecino de Tocuela, que proyectaba películas de cine comercial de la época. Luego fue el "Cine Aragón" que de igual modo, llevaba su proyector y sobre una gran manta blanca proyectaba películas del momento.
Otra expresión de cine fue introducida por el padre Alberto Ostiz, que en el patio de la iglesia proyectaba películas de corte católico.
Acá hay una familia de bordadoras a las que se filmó en San Antonino y cuya cinta dicen que se proyectó durante largo rato en los noticieros que antecedían a las películas en México y en Estados Unidos.
Por cierto, en la película "Los Hijos de Sánchez", se representa una boda y la banda toca la marcha que antecede al Jarabe del Valle. 
Otro detalle relacionado que noté en un video de un programa de música de tv por cable, corresponde al grupo Abba, en el que hay una canción cuyo nombre no preciso, pero la solista rubia lleva puesto un traje típico de San Antonino.
Es seguro que haya mucho más.
Actualmente han cerrado dos negocios de alquiler de películas y en cambio han aumentado a cuatro los negocios de venta de películas piratas.
Los paisanos ven mucho cine.




martes, 11 de octubre de 2011

La lección de Leónidas

De todo se aprende.

Leónidas es el mote de un respetable varón en plenitud que se hospeda en la Casa Hogar "San Lázaro" de San Antonino, con el que casualmente hablo mientras espero a alguien ahí.

Accede a platicar con el interés del médico que va a practicar una autopsia para esclarecer un crimen.

Mira sonriente con su desdentada boca y responde como él quiere, no lo que podría uno esperar.

Cuenta historias difíciles de creer. Dice que sabe manejar aviones. Que en la época de Carranza el mató a 35 soldados con una granada de mano que envío con una paloma a su campamento. (Desde aquí me doy cuenta de que solamente se quiere divertir conmigo).

Me pide un dulce. Afortunadamente le convido unos chiclets que mastica pausadamente.

Siempre de sonrisa alegre, me dice que estuvo casado siete veces y que todas las veces se le murió la mujer. Presume que tiene ahora una novia muy hermosa de 15 años que está esperando gemelos de él.

Me dedico a escucharlo con interés y respeto.

Dice que una vez se cayó en un pozo profundo, pero lo salvó una serpiente alargadísima que utilizó como mecate para salir de ese lugar.

El tiempo apremia, me disculpo porque la persona que espero no está. Sonríe y cuando voy de salida alcanzo a escuchar que le comenta a otro respetable varón, refiriéndose a mí: "Este cabrón se cree todo lo que le cuentas" y se ríe alegremente.


martes, 4 de octubre de 2011

La cena del fin del mundo

Tuvieron que morir.

Hace un par de años, de manera gradual y permanente, invadieron prácticamente todo el mercado municipal de San Antonino Castillo Velasco.

La mayoría eran perros callejeros que habían encontrado en el mercado local su nuevo hogar y además alimento, ya que los comerciantes, generosamente les obsequiaban desperdicios.

Pronto fue creciendo la población canina y junto con éstos, los problemas de ataques a personas, peleas entre perros, perros enfermos que daban un espectáculo lastimero y asqueroso. Hasta que hubo más animales que personas y las quejas de los clientes no se hicieron esperar.

Hubo que aguantar durante mucho tiempo los prejuicios de los defensores de los animales, que evitaron a toda costa agredir, correr o lastimar a la fauna perruna que había hecho de los puestos sus camas por las noches; de los pasillos del mercado sus nichos malolientes y de las entradas al mercado sus espacios para defecar. Junto con ellos se incrementaron de manera alarmante las moscas.

Cuando la tolerancia llegó a su límite, los mercaderes consideraron oportuno meter orden y generosamente repartieron suculentos pedazos de carne envenenada por todo el mercado, como en una cena del fin del mundo. Como era evidente, los perros callejeros no dejaron ninguna sobra y a la mañana del día siguiente aparecieron perros muertos regados por todo el mercado. Era triste ver casi llena la camioneta que se los llevó al tiradero municipal.

Una vez restablecido el orden, pasaron algunos años y nuevamente se ha multiplicado la población canina. Hoy en día los comerciantes discuten si será sano promover una nueva cena mortal, lo cual se ve difícil, porque mucha gente se opone.


viernes, 23 de septiembre de 2011

San Antonino supera sus problemas

Con la buena disposición de las partes involucradas y la participación del Gobierno del Estado, el municipio de San Antonino Castillo Velasco retoma gradualmente a la normalidad.



Según nos informan, existe amplia disposición de las partes para esclarecer los malos entendidos y avanzar en la resolución de los conflictos que son normales en los municipios del Estado.


Afortunadamente el diálogo, la razón y la ley, son las referencias que ambas partes invocan para reanudar las actividades en el edificio municipal, que no ha pasado a mayores.

Estamos atentos.

viernes, 9 de septiembre de 2011

Foto inédita del licenciado José María del Castillo Velasco

Esta es una fotografía inédita del Licenciado José María del Castillo Velasco.
Castillo Velasco es el segundo que está sentado de izquierda a derecha.
La fotografía fue donada por los descendientes del prócer al pueblo de la Heroica Villa de San Antonino Castillo Velasco y está resguardada en el Palacio Municipal.
Facilitando su distribución, la reproducimos aquí:






lunes, 22 de agosto de 2011

Soneto al Padre Alberto

En sus memorias de Un Quijote Sin Lanza, consigna el Padre Alberto (Director de la Casa Hogar para Ancianos "San Lázaro" de San Antonino Castillo Velasco) un soneto que le escribió su amigo Juan José Poe y por cuya belleza y fidelidad lo reproducimos a continuación:

"Un hombre transmutado en pan de amor
y maná para el más desprotegido.
Auxilio del anciano y desvalido,
del pobre y del enfermo. Protector.
Un hombre quijotesco: luchador
en defensa del débil, perseguido
a causa de lo justo, zaherido
como un Cristo viviente. Mediador.
Amable, complaciente, desprendido,
cabal, cierto, paciente y precavido.
Entregado a su afán, tierno y sagaz,
dispuesto a lo que sea por la paz
y en concordias de unión buen juez experto.
Un hombre irrepetible: Padre Alberto.

Poe, junio de 1999.

viernes, 12 de agosto de 2011

Leyenda del hombre que tuvo pacto con el diablo

Aunque usted no lo crea.
Hasta hace unos días me parecía que el viejo Me'mb ocultaba algo serio y grave.
Acostumbrado a contar largas historias fantásticas mientras degusta mezcal, me pareció que tenía mucha imaginación alentada por el metanol que lo arrancaba de la vida.
Ebrio o no, siempre sostenía lo que decía.
Una de sus más fantásticas historias---que cualquiera podíamos creer porque hay elementos de verosimilitud indiscutibles--- es que se sacó el premio principal del Melate y que nunca lo quiso cobrar. Digo que se puede creer porque al menos hay dos premios principales del Melate que nunca fueron cobrados en Oaxaca.
Y Me'mb dice que uno es de él, por eso ya no se aguantó más ----ya no se aguantó andar sin mezcal---y a cambio de acompañarlo a echarnos unos tragos me confesó el motivo por el que nunca quiso cobrar el premio.
Cabe señalar que soy la única persona que conoce esta historia, tal como se lo prometí.
Dice que siendo joven se había endeudado sin límite. Por causa de la pobreza lo abandonó su mujer. Perdió su casa. Vendió sus animales y su escaso patrimonio, refugiándose desde entonces en un solar a las orillas de San Antonino, que es la única herencia que conservó de su madre.
Viéndose en tal grado de necesidad invocaba e invocaba a santos, angeles y demonios, a ver quién lo sacaba del atolladero. Y en una de esas, por el cerrito de San Antonino, se le apareció un "catrín"; es decir, un señor de tez blanca como la nieve, joven de una belleza extraordinaria, pero frío, frío como cadaver y vestido con una camisa negra con orlas como de difunto sobre el pecho y un chaleco de piel negra. Su pantalón de piel y sus botas negras, eran acompañadas por una binza enorme como su estatura y abordándolo de lado le dijo: "Me'mb, estás muy jodido. Has perdido hasta la fé y ahora yo soy el único que te puede ofrecer dinero, todo el dinero que quieras para sentirte el único, para ser más que todos los que conoces y para comprar lo que nunca has tenido. Todo el dinero que te imagines yo te lo puedo dar cuando tú quieras. Tu no me podrás devolver el dinero y ni pagarme intereses. Lo único que sucederá es que sólo tendrás un año de vida después de que yo te entregue el dinero. Pero piénsalo, ¿a poco no vale la pena ese pequeño sacrificio para tenerlo todo, para humillar a los que te pisotean,  para vengarte de los que te discriminan, para cobrar todas las que te deben los hipócritas que te rodean?" Y acto seguido desapareció como había llegado.
Mem'b dice que sintió como si le hubiera echado un balde de agua helada por la espalda y que no se acuerda si aquello fue realidad o un sueño, por el hambre y la desesperación. Pero precisa detalle a detalle la entrevista con el personaje aquel.
Durante muchos años guardó el secreto al tiempo que acumulaba temores y caía en las garras del mezcal --- "más bien, el mezcal cae en mis garras, dice en tono de broma"---, y habiéndose dado cuenta de la dimensión de ese trato que le habían ofrecido, decidió no desear tener dinero, hasta el día en que fue brutalmente humillado cuando pidió prestado.
Dice que después de ser regañado, de ser humillado y pisoteado (lo cual es una mala costumbre cuando uno pide favores), le negaron el préstamo. Entonces deseó con todo su ser tener suficiente dinero para vengarse.  Y aquella noche soñó que se dirigía al centro de la ciudad a un local en donde venden juegos de lotería, fijándose especialmente en uno que se llama Melate.
Una amiga de Santa Ana Zegache que trabaja como nana en la casa de un panadero le facilitó cincuenta pesos para poder ir a buscar a Oaxaca la tienda que él soñó.
Preguntó cómo se participaba en ese sorteo y compró un boleto.
Ese día se durmió en el Parque del Llano y muy de mañana se dirigió al local hasta que lo habrieron y él pudo constatar el resultado, indiscutiblemente se había ganado el premio principal.
Dice que el corazón se le salía por la vieja y raída camisa y se revolcaba en un jardín del centro loco de contento y de incredulidad. Sobre todo, empezó a imaginar una por una las venganzas que tenía acumuladas hasta que en su larga lista, sus ojos toparon con la fachada de una iglesia y se recordó de inmediato del rostro del "catrín" y el recordatorio aquel de que tenía un año de vida a partir de recibir el dinero para hacer todo lo que quisiera.
Lo pensó mucho y consultaba a diario cómo y hasta cuánto podía cobrar el premio.
No se decidía. Estaba desesperado y en una de esas se dirigió al sitio en el que se le había aparecido el catrín. En ese lugar encontró una serpiente de coralillo que lo contemplaba fijamente. Un mal presentimiento lo embargó y se alejó decidido a tomar una decisión, acaso la más importante en su vida: quemó el comprobante del juego y nunca se presentó a cobrar el premio.
Después de un año de aquel suceso esperó su muerte con resignación, pero pasaron muchos años como hasta ahora y sigue vivo y no le va mal. Se dedica a sembrar y el mismo vende lo que cosecha.
En sus ratos libres se la pasa tomando mezcal en el amplio, amplísimo patio de su casa.

Después del mezcal minero que le llevé me prometió que me va a llevar al lugar preciso en que se le apareció el diablo.

Je, je, je.


jueves, 4 de agosto de 2011

Bordados de San Antonino

El bordado en San Antonino es de una belleza insuperable.
Se trata de un trabajo creativo que tiene como límite la imaginación.
Este es un modelo de bordado para manteles que se realizan en la comunidad y que son muy apreciados, principalmente para tapar los canastos que portan el pan o las viandas que se obsequian en los distintos eventos sociales.
Si por ejemplo, usted es padrino o consuegro o familiar o invitado especial en alguna festividad (mayordomía, boda, bautizo, primera comunión, cumpleaños, velorio, etc...) usted recibirá en su domicilio, por lo menos dos veces al día un canasto enorme que contiene alimentos según se corresponda con el horario (desayuno o comida) como por ejemplo, un jarro de chocolate, un jarro de atole, el riquísimo pan con los secretos de la cocina de San Antonino, el almuerzo respectivo en una olla con su dotación de tortillas tlayudas y sus complementos. También se le lleva una dotación de alimentos a las personas que brindan sus servicios como chocolateras, cocineras, tortilleras o según corresponda su papel en la festividad.
Y dicho canasto se tapa con este tipo de manteles.
¡¡¡Qué elegancia!!!

miércoles, 27 de julio de 2011

La extraordinaria cabeza prehispánica

Es todo un vestigio.
El cerro de San Antonino Castillo Velasco se caracteriza no sólo por las piedras hondonadas que debieron tener algún uso en la época prehispánica y que son las mismas con las que se construyó el Templo Católico de la comunidad, incluso, hay personas que las han encontrado en sus terrenos y las han utilizado para la construcción de sus casas.
La cabeza que está en el cerro de San Antonino mira hacia el sur y los temblores y la erosión la han afectado. Si se contempla con atención el conjunto de rocas, es probable que exista más de una cabeza. Desafortunadamente, como sucede con mucha arqueología en los valles centrales, no sólo es desconocida sino que las autoridades políticas no tienen el menor respeto por el pasado.



jueves, 21 de julio de 2011

Flor inmortal 2

¿Qué es una Calenda religiosa?

Me dicen que sea más explícito sobre lo que es una "Calenda Religiosa" y qué mejor muestra que una fotografía con artesanos de la comunidad en la que se aprecian los arreglos de bastidores de carrizo, recubiertos de la preciosa flor inmortal.

Estas canastas se llevan durante las procesiones religiosas que se realizan con motivo de las festividades del santoral católico en San Antonino.


Los artesanos de la foto, son una familia de San Antonino que, por cierto, distrituyen sus calendas para varias iglesias de la Ciudad de Oaxaca.

miércoles, 13 de julio de 2011

Flor inmortal

Prácticamente está desapareciendo.
Son contadas las familias que en San Antonino Castillo Velasco trabajan la flor inmortal.
Tras la muerte de los hermanos Delfino y Timoteo López, destacados maestros de  esta artesanía, prácticamente esta actividad ha entrado en una severa crisis de práctica y uso.
La flor inmortal se utiliza en múltiples y variados diseños de figuras de objetos religiosos, representaciones de personas, animales y seres de la naturaleza, teniendo su uso más destacado en la elaboración de las "calendas" o representaciones de figuras que se utilizan con motivo de las procesiones religiosas que se practican en el municipio.
La flor inmortal, que según dicen es de origen holandés, recibe su nombre así porque práctiamente nunca se marchita.

martes, 5 de julio de 2011

La extraordinaria azaña de un ovni que chocó en la zona

Hay varios testigos.
Principalmente allá, en los límites de San Antonino con San Juan Chilateca, dicen que un día, más o menos a la hora en que empieza a caer la tarde, se posó un platillo volador sobre un terreno de cultivo, que parecía tener problemas técnicos porque aterrizó de panzazo, provocando un ruido terrible por lo que los animales y las aves de los árboles salieron disparadas como si las hubieran asustado.
Los escasos campesinos que se encontraban en el lugar empezaron a llegar, en medio del ladrido de los perros que se dirigían con cierto temor hacia el terreno en el que la nave desconocida había caído, pero no bien se acercaban cuando aquel enorme aparato metálico---que algunos describen como la tapa en forma de corcho de una botella de sidra---, se levantó con fuerza y describiendo movimientos en zig zag se alejó para caer en terrenos de Santiago Apóstol.
Posteriormente se supo que el aparato aquel cayó en terrenos de cultivo de Santiago y que rápidamente los vecinos se acercaron. Dicen que como se impactó con gran fuerza, dejó unas marcas profundas sobre la tierra y que ----aquí viene lo más extraordinario e inverosímil de la historia---, de aquel objeto salió una persona de baja estatura con ojos en diagonal, completamente calvo, que miraba con curiosidad y amistad a todas las personas que lo rodeaban. Que se lo llevaron para una casa en la que le invitaron de comer y de beber y aquel personaje probaba poquito, pero de todo cuanto le servían y que no entendía ni una sola palabra de todas las preguntas que le formulaban, pero que se mostraba muy animado con todos.
Dicen que muchos ciudadanos dieron tequio para sacar la nave, pero como cayó en terrenos de cultivo, el propietario exigió el derecho para vender a la nave en la Ciudad de Oaxaca, por lo que se hizo acompañar del marcianito y la nave. Desapareciendo en este punto toda información al respecto.
Es una historia fabulosa.

martes, 21 de junio de 2011

Memorias de un Quijote Sin Lanza


Es fascinante.

El padre Alberto Ostiz, que consagró toda su vida al sacerdocio en el municipio de San Antonino Castillo Velasco, escribió su autobiografía titulada "Memorias de un Quijote Sin Lanza".

La edición del autor, con las modestas fotocopias encuadernadas, pronto se agotaron y el Padre Alberto prácticamente se quedó sin ningún ejemplar.

Afortunadamente, tuvimos oportunidad de leer su excelente autobiografía escrita con la pasión del hombre maduro que rememora cada paso de su vida desde su tierna infancia en España hasta su larga e interesante experiencia como el Sacerdote del Templo Católico de San Antonino Obispo.

Como sucede con las autobiografías, el padre Alberto Ostiz pinta de manera magistral su entorno en San Antonino y señala las virtudes y los defectos, los tesoros y la escoria de un pueblo que a èl mismo le tocó gozar y sufrir.

El libro es, además, un referente muy importante para conocer la historia contemporánea de San Antonino, desde la perspectiva del liderazgo social que representa el padre Alberto y por qué no reconocerlo, la autocrítica del intelectual que juzga su institución eclesiástica con la autoridad moral del que se mueve en los laberintos de la iglesia en Oaxaca y es injustamente afectado por su propia autoridad.

La autobiografía no tiene pierde y la iremos publicando en entregas, ya que el día de ayer me lo encontré en Bodega Aurrerá de San Antonino y me autorizó verbalmente difundir su autobiografía.

Bien por el Quijote Sin Lanza, indiscutiblemente figura señera de San Antonino Castillo Velasco.

sábado, 18 de junio de 2011

Empanadas de San Antonino


Son uno de los platillos típicos de San Antonino.

Claro, también se hacen en Tlacolula y gente de muchos pueblos las elaboran para su venta en la Ciudad de Oaxaca.

La diferencia es el sazón y el contenido.

Se trata de un producto típicamente indígena porque están echas a base de maíz con chile y con ingredientes locales, que además se enriqueció con la llegada de los españoles a México, pues a la pasta se le agrega carne de cerdo y se utiliza hoy en día la manteca para su elaboración, así como varias especias.

Dicen los mayores que antiguamente las empanadas eran como hoy son las tortas o los sandwiches, es decir, comida rápida para llevar al campo o al viaje.

Existen varios estilos de elaboración de las empanadas y al menos las cocineras de San Antonino tienen ingredientes secretos que le dan un sazón especial, un olor típico y un sabor muy rico.

En la foto está la señora Cecilia Gómez, que viene de una familia de cocineras típicas de San Antonino y que las prepara hoy en día sólo para festividades. Pero si un día viene a San Antonino y quiere comerse una empanada pregunte por Señora Bernita en la Calle Constitución, que las elabora a diario y que son, sin duda, de las empanadas con mayor demanda en San Antonino.

Las empanadas de San Antonino se acompañan con lechuga, rábanos y limón.

(Ya se me antojó una.)

miércoles, 15 de junio de 2011

San Antonino y San Pablo Huixtepec

Son viejos conocidos.

Los pueblos de San Antonino Castillo Velasco y de San Pablo Huitepec, en el distrito de Zimatlán, mantienen relaciones añejas.

Como sucede en la mayoría de las localidades del Estado, por lo general existen relaciones comerciales, culturales, económicas o de simple amistad que generan  acercamientos y lazos de identidad.

Este domingo fue la fiesta patronal de San Pablo Huixtepec.

La festividad de San Pablo Huixtepec, es una de esas, no sólo por los intercambios comerciales. San Pablo tiene una tradición de cultivos intensivos y ahí se encuentran varios servicios agrícolas.

Ahora, con motivo de la fiesta patronal, la mayoría de los vecinos de San Antonino Castillo Velasco, acuden a la fiesta, ya para vender nieves de leche quemada, pan de fiestas, los tacos de tazajo, cecina, chorizo o cabeza de res o de cerdo, con la preparación típica que los hace muy solicitados; o bien, como pudimos darnos cuenta, como visitantes, es extraordinario el número de personas de San Antonino que acuden a la fiesta local.
Esta festividad presentó en esta ocasión una añeja tradición a punto de extinguirse y que consiste en que durante la misa, en el ofertorio, se presentan los danzantes de la pluma, que a decir los mayores ya casi no se practica y que es una tradición que viene de la colonia.

Asimismo, correspondió estrenarse como diácono a Horacio, un gran amigo del municipio de Ocotlán de Morelos y que está trabajando muy duro para obtener el sacerdocio.

Qué bueno que los festividades locales unen a los pueblos.


El sermón de la misa estuvo

lunes, 6 de junio de 2011

Libro de Castillo Velasco dedicado a Juárez

Esto es una auténtica joya.

En 1871, siendo Presidente de la República Don Benito Juárez García, recibió la dedicatoria de uno de los libros escritos por el licenciado José María del Castillo Velasco, titulado "Apuntamientos para el Estudio del Derecho Constitucional Mexicano".

La obra es un clásico del Derecho en México y se localiza en la biblioteca de Santo Domingo de Guzmán que se encuentra en el interior del Templo Dominico que lleva ese nombre, en la Ciudad de Oaxaca de Juárez.

El libro lo sacaron en una exposición de materiales bibliográficos de la época de Don Benito Juárez.

Lo comparto para la felicidad de propios y extraños, especialmente para nuestros amigos de San Antonino Castillo Velasco.

Vale.



viernes, 3 de junio de 2011

A propósito de mototaxis

Es una causa de la desaparición de los campesinos.

El trabajo de campo es rudo, los insumos son caros y la cosecha está condicionada al medio ambiente, además de que los precios se fijan como en la bolsa de valores: a veces pierdes todo o a veces ganas bien.

Como dice una paisana que produce y vende en el mercado de abastos: "sembrar es como jugar con un billete de lotería, a veces---muy raras veces le atinas al premio principal, a veces obtienes un premio chico, otras, obtienes un reintegro y la mayoría no obtienes nada---.

Descartando, desde luego, las condiciones del trabajo de campo--- falta de tecnificación, de apoyos y competencia desleal promovida por fuertes intereses desde las más altas esferas del poder---, en general no se ofrece como alternativa de desarrollo.

Gradualmente los campesinos de San Antonino se van haciendo menos y es cada vez más común ver enormes terrenos prácticamente abandonados o que son atendidos con cosechas de conveniencia: maiz, calabaza, frijol...

Y una alternativa de trabajo es precisamente el dedicarse al servicio de mototaxis.

Por eso no es extraño que existan siete asociaciones de mototaxis que agrupan a más de 150 unidades de motor que genera cada uno mínimamente y en el peor día un ingreso diario equivalente a 30 dólares como ganancia neta.

Definitivamente se trata de una actividad mucho más lucrativa que el campo, en las condiciones actuales.

martes, 31 de mayo de 2011

Transporte ex ecológico

Es en serio.

La primera organización de bicitaxis en San Antonino se llama Unión de Transporte Ecológico.

Surgió hace como doce años y desde entonces, las uniones no han dejado de multiplicarse. La diferencia es que ahora todas, excepto el bubulín, todas absolutamente tienen motos o carros de motor llamados mototaxis.

Antes, los bicitaxis eran remolques jalados por un atlético bicicletista que se esmeraba en transportar a los usuarios y sus cargas, dejando a su paso un tufo de sudor propio del hombre que está haciendo ejercicio todo el día. Eran delgados y con piernas de futbolistas.

Hoy las cosas han cambiado. La inmensa mayoría de mototaxistas están engordando sin darse cuenta y son más lentos para realizar sus actividades. Es poco el ejercicio que realizan y van comodamente propulsados por el motor de su unidad.

Al mismo tiempo, San Antonino ha aumentado su contaminación ambiental. Como prácticamente los paisanos trabajan desde la mañanita y hasta el anochecer, prácticamente las 24 horas se escucha el raudo y ruidoso motor de esas cajas con llantas que van anunciando la modernidad por los caminos de San Antonino.

jueves, 26 de mayo de 2011

La muerte del militar

Es un efecto de la guerra.

Sí, de la guerra que se lleva a cabo entre el Gobierno Federal y los cárteles de la droga.

Gran expectación causó un funeral con distintivos militares en San Antonino. Desde un día anterior, los familiares que no radican en el municipio llegaron vestidos de luto y la gente se preguntaba: ¿quién se murió?

Pronto los enterados corrieron el rumor, "fulano de tal, que radica en México y trabaja en el Ejército".

En los funerales en San Antonino realmente no se utiliza el negro como luto. Las personas asisten vestidos de manera normal. Únicamente las mujeres llevan sus rebozos con los que se cubren la cabeza, en señal de respeto.

Durante la procesión se vió un ataúd lujoso, elegante, bonito, cubierto con una enorme bandera mexicana. Algunos militares vestidos elegantemente con sus uniformes acompañaban con gallardía al cortejo fúnebre.

La banda de música entonaba el angeluz y toda la gente miraba con respeto y solidaridad al hijo caído en la lucha contra el mal.



lunes, 23 de mayo de 2011

El milagroso niño toninero 2 y última.

Dicen las abuelas en San Antonino que nunca tengas un marido mudo o enojón.

Y para ilustrar esa recomendación rememoran el caso de Colenita, que tenía un marido que era viajero. Es decir, era un comerciante que hablaba poco y era enojón y que con una recua de burros llevaba a vender productos de San Antonino al Istmo y de regreso traía sal y pescado fresco que repartía en los mercados de Valles Centrales.

A su regreso, calculado en días y horas precisas, conforme a la luz del sol, el comerciante solicitaba a su esposa puntualmente la comida que quería. De modo que cuando la luz del sol produjo una sombra por el lado norte del mangal del patio, Colenita supo que eran las tres de la tarde y que en ese momento debía empezar a servir los chepiles pero bien calientes, casi hirviendo.

El comerciante llegó puntual y sin mediar palabra esperó que le sirvieran su plato de chepiles.

Les puso limón, sal, salsa de chile de agua, tortillas bajaditas del comal y justo cuando se disponía a llevarse el primer bocado que le sale un enorme y oscuro cabello de mujer en el caldo.

Sin decir palabra, pero con un rostro de enojo, lo exhibió ante su mujer.

Luego, dejándolo a un lado, desprendió la culebra que protegía su ceñidor, como se acostumbraba antes y empezó a golpear a su señora.

La abnegada mujer resistió los golpes con resignación, mientras las lágrimas escurrían por su rostro.

Y así estaba golpeando a la mujer cuando de pronto ingresó a ese domicilio el Milagroso Niño Toninero y levantando el brazo gritó al viajero: "Detente. Ya no le pegues. Yo sé quién puso este cabello en tu plato de chepiles.

El viajero le dijo "te voy a dar mucho dinero si me lo enseñas".

Entonces, el Milagroso Niño toninero le respondió, "Es una persona muy fuerte, con mucho poder. Pero si lo quieres ver completamente te va a costar la vida. Si lo miras completo te mueres. Pero yo te puedo mostrar parte de él.

El viajero, conociendo la fama y la autoridad del Niño le contestó, "quiero ver lo que menos me haga daño". A lo que contestó el Milagroso Niño toninero: "Te mostraré el brazo, eso únicamente lo podrás ver tú, y el efecto por esta visión es que te quedarás inconsciente un día". Trato que aceptó el comerciante.

Acto seguido, el Niño pidió apoyo a dos topiles o policías para que le ayudaran a jalar una cuerda que había lanzado como tratando de cazar a un animal bravo para que no se pudiera ir.

Dijo el Milagroso Niño toninero: "Muy bien, qué brazo quiéres ver, el izquierdo o el derecho", a lo que el otro respondió el izquierdo.

Haciendo una especie de exclamación de horror y asco el Milagroso Niño dijo: "aquí tienes, mira ahora y no vuelvas a pegar a tu mujer hasta no conocer bien las cosas" y acto seguido el comerciante miró y cayó desmayado durante 24 horas.

El Milagroso Niño le dijo a la mujer: "No temas. Jamás te volverá a pegar. Lo que ha visto lo hará cambiar para siempre."

Cuando el comerciante despertó se arrodilló ante su mujer y con lágrimas en los ojos le pidió perdón, le dijo que había visto muchos cabellos largos y negros sostenidos por la mano del diablo.

(Contada por Mamalena, que la escuchó a su vez de su abuelita, una mujer que murió a los 103 años.)












lunes, 16 de mayo de 2011

El milagroso Niño de San Antonino 1 de 2

Es una historia real.

Muy pocas personas mayores recuerdan las crónicas de sus ancestros.

Este es uno de esos casos.

Sin duda, uno de los personajes más importantes de la historia de San Antonino---cuya existencia se diluye entre la realidad y la leyenda a la manera del humo que escapa por los resquicios del olvido--- es la del Milagroso Niño que nació, vivió y murió en San Antonino Castillo Velasco.

Yo no le daría tanta importancia, de no ser porque es la segunda referencia que encuentro.

En esta ocasión señalaré la primera referencia que tuve de dicho niño:

Dicen los mayores que hubo una época de sequía inesperada e inexplicable y las lluvias no se daban.

Entonces, de entre la población, había un niño---seguimos investigando---, que era hijo de una humilde familia. El niño, que vendría a tener unos seis o siete años, le dijo a los adultos: "Vístanme con una túnica y sáquenme en una tarima por las calles de la población y yo con mi oración haré que llueva".

La mayoría de las personas se reía, pero había algo extraño en la voz, en la mirada y en la determinación de aquella criatura, además de la natural desesperación por la ausencia del agua, que hizo que varios vecinos decidieran que si bien aquel acto no les resultaba exitoso, tampoco les generaría pérdida. De modo que adecuaron una mesa con un mantel, vistieron al niño con una túnica y lo sacaron a pasear sobre la mesa en los hombros de los adultos, cargado por todas las calles de la población en medio del calor asfixiante.

El niño iba sumamente concentrado con las palmas de las manos pegadas a la altura del pecho, como si de un santo se tratara y su silencio era imitado por las personas que lo seguían en numerosa procesión a la manera de una calenda.

No faltó quien llevara el incienso, flores y cirios, como si se tratara en realidad de un acto religioso.

Dicen que ni bien terminaban de recorrer media población cuando el cielo se nubló y los rayos empezaron a caer por el cerrito de San Antonino, mientras gruesas gotas de lluvia se azotaban con fuerza sobre todo lo que hubiera en toda la población.

Inesperadamente la lluvia se dejó caer con tanta fuerza y durante largo rato que muchos caían de rodillas agradeciéndole a Dios y al Niño por tal milagro.

Así, el Milagroso Niño era vitoreado y con gran júbilo y respeto lo dejaban en su casa, llevándole regalos como tortillas, chocolate, carne, hilos de seda, gallinas...

Entre la escasa información que existe, dicen que hubo varias ocasiones en que se realizó el milagro a través de ese prodigioso Niño.

martes, 10 de mayo de 2011

Funerales en San Antonino

La muerte no viene sola.

Al menos en San Antonino, cuando muere una persona, la población teme, se presenta a misa, se confiesa y reza. Es tiempo de recogimiento, porque el fallecido no se va sólo.

La semana pasada murió Mamalicha a los 90 años.

Su fallecimiento se divulgó por los altavoces de la comunidad a los cuatro vientos.

Toda la familia se presentó desde muy temprano para ayudar a asear la casa. Los hombres se dedican a los trabajos pesados: cortar leña, poner las tinas para la ceniza que servirá de estufa a la chocolatera, acarrear suficiente agua para la cocinera y sus ayudantas, poner las mesas para los visitantes, asear en general el lugar en el que se montará el altar adornado con las calendas de flor inmortal y las cabezas sonrientes de los regordetes ángeles entre los cientos de flores, principalmente gladiolas.

Los familiares de la difunta no visten estrictamente de negro, pero las mujeres llevan rigurosamente su rebozo sobre sus cabezas, en señal de respeto, llegan con cirios, gladiolas, una botella de mezcal, una caja de refrescos y dinero en efectivo que le ofrecen como apoyo a los descendientes.

Durante nueve días que duran los rezos, se pagan nueve misas en el Templo de San Antonino y posteriormente de las misas, que son a las siete de la noche, todos los familiares se concentran en la casa de la difunta, que está de cuerpo presente de dos a tres días en el ataúd que ocupa el centro del altar familiar, para continuar con el rosario.

Entre el humo de incienso, los cirios y el extraordinario mundo de gladiolas, en el surrealista escenario de ángeles y santos, el rezador---que por lo general es un varón versado en la tradición católica---, dirige al frente de los asistentes el rosario, al término del cual, en señal de haber concluido el rosario, todos se saludan con un "buenas noches" personalizado, es decir, se saluda con un buenas noches a cada persona mencionándole su nombre: "Buenas noches tío fulano", "Buenas noches tía fulana" y así hasta haber saludado a todos los presentes.

El Rosario es amenizado por un grupo o un organista que acompaña, entre rezo y rezo, con canciones religiosas.

Al término del rosario, invariablemente se ofrece de cenar a todos los presentes, previo brindis con mezcal en señal de respeto y solidaridad con el casero.

Durante los nueve días que dura el Rosario, los deudos dan de desayunar, comer y cenar a los asistentes. Aunque la mayor parte de las personas llegan al rosario en la noche, los días en que se llena de gente el funeral es cuando se entierra a la persona, después de una misa de cuerpo presente y todos caminando van cargando el ataúd hasta la capilla del panteón, en la que se efectúan los últimos rezos previos a su entierro.

Antes de depositar el ataúd bajo tierra, se levanta la tapa y se exhibe al difunto para que los deudos le den su bendición y le echen un puño de tierra a la caja.

El otro día de asistencia numerosa es, al término de los nueve días, el levantamiento de la Cruz ---la Cruz que se manda a hacer de madera o de metal, en la que se consignan los datos de la persona fallecida---. Esa noche el Rosario se duplica, después de misa, y concluye por lo general a la una de la mañana, para que al dia siguiente, en misa de las siete de la mañana todos juntos, con cirios y música se va a depositar en la tumba de la persona fallecida.

Ahí prácticamente concluye la ceremonia de los funerales.

Después de la muerte de Mamalicha, la semana pasada, al día de hoy han fallecido cuatro personas en San Antonino.

Los muertos no se van sólos.

viernes, 22 de abril de 2011

Domingo de Ramos hace 60 años

Cat Zampancú sonríe y recuerda que en San Antonino hace 60 años el agua de los pozos estaba a un brazo de profundidad y que en cualquier época del año se podía agarrar la barreta y encontrar ojos de agua debajo de la tierra.
Las cosechas se daban de manera abundante y generosa y esa abundancia y esa generosidad se hacía extensiva en toda la región, ya que cuando salía el Señor del Burro de donde ahora se ubica el mercado municipal, se le adornaba como ahora, con la mejor cosecha, los mejores bordados, las mejores artesanías y alhajas de oro.
Entonces las personas escogían de lo mejor de la cosecha y en estas fechas lo regalaban a los pepenadores, que eran personas de escasos recursos de los pueblos circunvecinos que llegaban a San Antonino con burros, para llevarse esa muestra de generosidad y abundancia.
Dice Cat Zampancú que las personas si veían unas semillas de maíz tiradas en el camino, las levantaban con mucha delicadeza y respeto y les pedían perdón. Incluso hoy en día, las personas mayores ponen mucho énfasis en levantar comida o semillas del piso porque dicen que lloran si no se les levanta.
En aquellos años, dice Cat, que cuando se representaba la crucifixión de Jesús, los varones se golpeaban la espalda con mecates y las mujeres se golpeaban el rostro diciendo: "Por mi culpa, por mi lengua...por mis malos pensamientos...por mis acciones...", que era una forma de expiar las culpas y al mismo tiempo de pedir perdón por los pecados.
Cat Zampancú señala que entonces, por tanta fé, no había granizadas, ni se echaba a perder la cosecha y que en las mayordomías---que entonces se caracterizaban porque había banderas de los señores, los solteros, las señoras y las señoritas---que hoy ya no se ven, se juntaba una gran cantidad de dinero con la vendimia y correspondía al mayordomo guardar el dinero y aumentar la cantidad en la celebración anual siguiente, y que de ahí se tomaban recursos para satisfacer las necesidades del templo católico.
Cat Zampancú es un torrente de memoria histórica.

lunes, 18 de abril de 2011

Domingo de Ramos

Este fin de semana se efectuó con mucho éxito el tradicional Domingo de Ramos en San Antonino, caracterizado por una añeja tradición de la misa del medio día, previa carga y adorno del "Señor del Burro" en la capilla del panteón municipal y su ingreso triunfal al atrio del templo católico, ante unos tres mil asistentes

La misa y el evento de la "vendimia" estuvo animado por la Banda Filarmónica Tilcajete, una banda infantil con mucho talento que se está convirtiendo en un ícono de las nuevas bandas de música en la región.

Adicionalmente se instaló un mercado de artesanías y antojitos locales que hizo las delicias de chicos y grandes.

La "vendimia" caracterizada por las ofrendas con que adornan al Burro, mostró la buena voluntad de los donadores, ya que, como es usual, se vieron los mejores productos de la cosecha, de las artesanías, del pan, de bordados, de ganado y de alimentos, que fueron donados para ser subastados para beneficio del Templo Católico.

Dice la tradición que donar los productos para la vendimia es una buena señal para tener abundancia el resto del año.


miércoles, 13 de abril de 2011

Ya se abrió Bodega Aurrerá San Antonino

Me están consultando que qué ha pasado con la bodega Aurrerá en San Antonino.
En este mismo espacio publicamos el dos de febrero la noticia de su apertura en una colaboración que se tituló "Crónica de una apertura anunciada", que se puede leer más abajo.
La tienda está funcionando de manera ordinaria.
Según informan los comerciantes de abarrotes, que son los más afectados, realmente no ha tenido un efecto grave en San Antonino, aunque señalan que han visitado a la bodega y ahí han encontrado a muchos de sus clientes ordinarios.
Hasta el momento todavía resulta temprano para hacer un análisis de los efectos de la tienda en los comercios de San Antonino, ---suponiendo sin conceder----,primero porque el impacto parece ser que ha sido sobreestimado; en segundo lugar, porque los consumidores, en su mayor parte, son vecinos del municipio de Ocotlán de Morelos y de municipios circunvecinos.
Así las cosas por el momento.

viernes, 8 de abril de 2011

Tesoros ocultos

Son varios.
Algunas personas de San Antonino son herederas de algunos objetos de arte antiguo de carácter religioso.
Tratándose de un pueblo de campesinos comerciantes, antaño invertían en la adquisición de objetos que resaltaran su religiosidad.
Hoy en día, algunos de esos vestigios están repartidos y sufren el deterioro natural del tiempo.
Beto, que conoce a las familias que conservan todavía algunos objetos valiosos, me mostró el extraordinario Jesús crucificado antiguo que tiene en su sala.
Es de madera y tendrá unos dos metros de alto. El realismo de su expresión es impresionante. Cada detalle de su rostro transmite la psicología del sentimiento propio de esa figura y hace que uno se sienta en un entorno más religioso.
Beto menciona las figuras que él tiene conocimiento que poseen algunas familias y dice que antiguamente las personas más pudientes del pueblo tenían altares que eran auténticos adoratorios dignos de una fe comprometida.
Precisamente esos altares contaban con una figura principal, que al mismo tiempo, era la más grande y a la que se dedicaba con mayor fervor la oración de las familias.
Incluso, comenta, las familias más humildes construían altares con artesanías locales y que eran una muestra real de fe y compromiso con su religiosidad.
Casi en todos los domicilios de San Antonino hoy existen altares con el santoral católico, al que prenden veladoras y ofrecen flores.
Yo sospecho que la tradición, incluso, es prehispánica.

lunes, 4 de abril de 2011

Tres básculas nomás

En el mercado de San Antonino se robaron tres básculas.
Obvia decir que el mercado, en realidad son tres mercados pegados, pero divididos por coyunturas históricas.
La primera fue que cuando se construyó el mercado original hubo una disputa por los espacios, que derivó en la venta de los locales y sus dueños originarios salieron del mercado para ocupar espacios afuera, con lo que se techó la vía pública. Con esta medida se creó el segundo mercado. El tercer mercado fue cuando, por las necesidades de espacio, se ocupó una parte del terreno del templo católico, en que también se techó. Los tres espacios cuentan con sus respectivos comités.
Al menos los que están ubicados en la vía pública, a un costado del templo católico, dejan sus pertenencias en sus puestos, que son precisamente los que fueron asaltados y en los que se extrajeron tres básculas.
Qué pena.

jueves, 24 de marzo de 2011

Fotografía del licenciado José María del Castillo Velasco


Esta fotografía está tomada del retrato que existe en la Secretaría de Hacienda donde aparece Don Benito Juárez con su gabinete. Como me la han solicitado muchos estudiantes, aquí la publicamos con mucho honor. Adicionalmente va una pequeñísima biografía del hijo pródigo de San Antonino Castillo Velasco:

Nació en el hoy municipio de San Antonino Castillo Velasco, el 11 de junio de 1820. Estudió jurisprudencia en el Colegio de San Ildefonso, graduándose en 1824. Como abogado y periodista fue un apasionado defensor de los indígenas y de las libertades. Es autor de textos de Derecho Constitucional y de Derecho Administrativo. Fue diputado al Congreso Constituyente  que elaboró la Constitución de la República de 1857. Participó como coronel en el sitio de Querétaro de 1867. Fue ministro de Gobernación de Don Benito Juárez en 1871 y de 1877 a 1881 fue Ministro del Tribunal Superior de Justicia del Distrito Federal. Fue fundador de la Escuela de Artes y Oficios para Mujeres, de la Escuela Normal, de una escuela para ciegos y de un asilo de ancianos. Murió en México, D.F., en septiembre de 1883, mientras era Director de la Escuela Nacional de Jurisprudencia.

martes, 15 de marzo de 2011

Miércoles de tamaliza

Como es usual en la cuaresma, este miércoles inician en San Antonino los miércoles de tamales.
Por las tardes y hasta el anochecer, en el mercado y en la explanada municipal se instala una auténtica feria del maiz. Hay venta de tamalitos de chepil---que tienen un aroma enloquecedor---, se acompañan de salsa de jitomate rojo y su sabor es realmente muy agradable; los tamalitos de dulce, con un color rosado que simulan un dulce con pasas; los tamales de verde, con pollo o con cerdo; el nicuatole, que es la gelatina de maiz; el atole de leche, de granillo o con arroz. Además hay exposiciones de maíces criollos y de figuras de totomoxtle. Todos los miércoles de cuaresma, que son una añeja tradición en San Antonino. 

lunes, 7 de marzo de 2011

Inicia la festividad del Señor de la Sacristía

El sábado pasado arrancó la Calenda del Señor de la Sacristía.
Una de las festividades más importantes del calendario católico de San Antonino.
El domingo, el templo católico lucía con un arreglo de flores maravilloso, propio de un pueblo que cultiva flores y que en su religiosidad demuestra su talento con el ornato, dándole al templo un aroma especial y con un colorido fascinante.
Por la tarde, dos bandas amenizaron las celebraciones mientras que en el atrio del templo un enorme castillo de fuegos pirotécnicos ardía ante un público evidentemente impresionado.
La feria de juegos mecánicos se ha extendido en el zócalo del pueblo y se espera que continuén los festejos toda esta semana hasta la octava que será el próximo domingo.

lunes, 28 de febrero de 2011

Quema de basura en San Antonino

Aunque son pocos el resultado es mayúsculo.
Una creciente práctica de vecinos de esta comunidad es la quema de basura en sus domicilios.
Algunos dicen que el carro de la basura, que pasa una vez a la semana, es insuficiente para echar los desperdicios que se juntan.
Otros dicen que siempre han quemado la basura en sus domicilios y nunca nadie les ha dicho nada.
Cualesquiera que fuera la causa, un hecho es evidente, la gente quema basura sin ningún respeto por el medio ambiente ni por los vecinos.
El humo, que se filtra como los chismes, rápidamente invade los domicilios, la ropa y se mete hasta la cocina.
Lo peor es que la gente, sin saberlo, se está causando mucho daño por la gran cantidad de plásticos que queman en sus domicilios.

viernes, 11 de febrero de 2011

Artesanías de San Antonino

Los pueblos agricultores despliegan una prolífica creatividad en su vida cotidiana.

En San Antonino Castillo Velasco así lo muestra la variada gastronomía local, enriquecida por el contacto con los españoles y recreada por la tradición prehispánica.

Las artesanías se ubican en este rubro.

En las próximas colaboraciones abordaremos el trabajo de los artesanos de San Antonino, como la flor inmortal, el bordado, el totomoxtle, el barro cocido, y algunas actividades elaboradas con estilos artesanales, como el mezcal toninero, los cortes tradicionales de la carne en San Antonino, el pan típico, los huaraches, las artesanías que prácticamente han desaparecido como el arte con carrizo y los escenarios fúnebres.

Información hay mucha, el tiempo a veces se complica.

Continuaremos...



miércoles, 2 de febrero de 2011

Crónica de una apertura anunciada


Fue al mejor estilo de la lucha libre.

Todo comenzó cuando la enorme y regordeta Mamalucha, enfundada en su traje verde de calzoncillos rojos  y su máscara que deja ver el entrecejo fruncido  e inflada con suficiente aire que le da el poder del capital, salió a anunciar por todo el distrito de Ocotlán la apertura de la bodega Aurrerá.

Parada sobre la defensa trasera de un pequeño autómovil, rotulado con el nombre de “Aurrerá San Antonino” se paseaba amenazante ante la mirada curiosa de los paisanos que se preguntaban “ esa vieja plastificada, qué calenda anuncia”.

Llegado el día dieciocho de enero de dos mil once, día de la inauguración y de la prueba de fuego para el grupo de los aguerridos paisanos que sufrieron muchos corajes por el proceso discrecional de las autoridades municipales ante la apertura de esta tienda, la expectación era general, ya que se esperaba una demostración del poder popular, que lamentablemente para algunos, no se materializó en la lucha de clases, sino en una extraordinaria demostración del poder adquisitivo de la población de este distrito.

Antes de que se abriera la puerta  de la tienda, la gente ya se arremolinaba a la entrada como si la mercancía se las fueran a regalar, en tanto que en el interior del local, los empleados y los supervisores estaban sumamente nerviosos y comentaban entre ellos que probablemente toda esa gente eran inconformes que iban a impedir la apertura de la bodegota.

Cuando se inauguró, el remolino de gente se lanzó sobre la entrada mientras los empleados de la tienda trataban de distinguir a los clientes de los posibles saboteadores.

La tensión bajó cuando la gente, como las hormigas sobre el migajón, se distribuyó en los pequeños diez pasillos de la tienda, en los que sólo caben dos personas de lado, pero eran cientos de clientes,  por lo que no faltaron los conatos de bronca por los empujones, los pisotones  y el griterío porque los ansiosos compradores tardaban mucho tiempo detenidos  frente a la mercancía, ya comparando los precios,  ya analizando los productos o simplemente contemplándolos.

Las indirectas y las agresiones estaban a la orden del día: “Ora tú, mueve tu calabaza que estás tapando el paso” “Calabaza la que te parió” “Hey, déjenme pasar que no encuentro a mi niña”, “Cuidado  señoras, fíjense ya están tirando la mercancía” “No empujen” “Ay, Dios, cómo se nota que nunca han ido al super” “Dejen de discutir, avaaaaanceeeen yaaaaaaaaaaaa” “Orale, no me empujen que yo no vengo de mirón, yo si voy a comprar” “Pues compra y vete que estás estorbando el paso” “Ora sí que compras y te vas, ja, ja, ja”.

Afuera de la tienda, los mototaxistas de Ocotlán intentaban instalarse su base en el repleto estacionamiento para clientes, pero los mototaxistas de San Antonino percibieron la maniobra y con atinado celo se dieron un entre muy al estilo de Mamalucha la enmascarada pegalona.  Y en medio de una batalla campal que duraría unas cuarenta y ocho horas, en lo que viene a ser una más de las interminables batallas por la conquista del territorio entre dos municipios vecinos con problemas de límites y de civilidad. Hay que recordar que los mototaxis de Ocotlán no entran a a San Antonino y viceversa, aunque ambos municipios estén divididos por una calle.

La zona alrededor de la tienda parecía un área de desastre debido a un enorme embotellamiento  de vehículos  por todos lados. Nunca en la historia de San Antonino se había tapado la entrada y salida de la comunidad por el exceso de autos y camionetas y de taxis foráneos que vinieron de compras. Tampoco podían salir los automovilistas que estaban dentro del pequeño estacionamiento de la tienda de modo que se armó un tremendo caos vehicular en medio del ruido de los motores, el ensordecedor ruido de los insultos generados a ritmo de claxon y la desesperación de los peatones para tratar de pasar la calle.

La policía municipal de San Antonino con evidente nerviosismo pedía más refuerzos para evitar por un lado, que la bronca entre mototaxistas se saliera de control, mientras soportaban los insultos de los automovilistas porque no podían dirigir el tráfico ni apoyar a los peatones que se peleaban contra los automovilistas porque ni unos ni otros se dejaban pasar.

En la tienda los anaqueles quedaron rápidamente vacíos  y entre las largas e interminables filas para pagar se escuchaban comentarios entre los compradores:  “Qué pichicatos, si quieren vender por qué hicieron una tienda tan chiquita”  “Los precios tan iguales que en cualquier lado” “Ya viste, no le pusieron el nombre de San Antonino a la tienda”.

Obvia decir que el caos continúa hasta la fecha porque la gente abarrota día y noche la bodegota, seguramente porque decidieron gastarse su dinero  y ya no regalárselo a las cajas de ahorro, mientras la enorme y regordeta figura de Mamalucha, enfundada en su bikini rojo con su cara de fuchi se muestra dispuesta a sonarse al primero que se le acerque.